ojalá que me despierte y no busque razones

Te busco en el hueco que queda en mi alma, tan frío y profundo que no encuentro nada,
quisiera volverme invisible, colarme esta noche en tu cama.
Me acuesto a la sombra de un árbol sin ramas, las dudas y el miedo me sirven de almohada,
dormirme sería imposible, la hierba me escuece en la cara.
Que,
cada vez que te vuelva a mirar,
me resulte más fácil morir que obligarme a decir la verdad.
Rayo que no cesa, mar en calma,
faro entre la niebla, viento de cara, viento de cara.
La luna se asoma y parece de plata, el sol le hace frente al llegar la mañana,
quisiera que fuera invencible, y que nunca jamás se apagara.

empiézate a reír y dame de fumar

Nunca he creído en el amor, al igual que nunca he tenido la esperanza de que me tocase la lotería. Sé que esas cosas solo le pasan a la gente con suerte, que no son para mí. No creo que vayan a sucederme a mi nunca. Pero... pero.
Me siento tan descolocada y feliz ahora mismo, como cuando te fumas un porro tumbado en la hierba en una sombra cualquiera en pleno verano, no entendiendo muy bien qué pasa pero jodidamente contento.
Pero la felicidad suele acabárseme, no es eterna. Pero a veces las cosas cambian.
Y sé, que contigo soy la persona con más suerte del mundo. Incluso sin que me haya tocado la lotería.

Recordé, sin querer, cómo era el tacto de tu piel, y sin duda, aún te llevo en vena.

Hay que ver como cambian las cosas, incluso en poco tiempo.
En 7 meses. Siete intensos meses.
Ha pasado de todo, y más que va a pasar.
Ya solo quedan 3 meses más, y me da mucho miedo pensar en el final.
En como acabará todo. En como seguirá. ¿Seguirás queriéndome con la distancia?
Que te imagino queriendo a otras y se me parte el alma.
Y sé que ya lo has hecho, antes de mi.
Pero es que ahora quiero ser yo siempre. Yo para siempre.
- 3 meses.
El verano en mi vida siempre ha significado grandes cambios.
Veamos qué me depara este. Si va a ser contigo, o sin ti.

Nadie sabe cual es realmente mi punto débil si lo encuentras no me rompas, te lo ruego.

Tuvimos momentos gratos,
pero lo asumo, tú solo querías follar,
te dije:"voy a por tabaco",
sabes que no fumo y aún así me dejaste marchar,
me enganché a ti, es verdad,
la realidad me engancho a todo con mucha facilidad.
Mi felicidad va más allá del amor superficial,
un polvo y hablar es mi necesidad,
cuando mi alma está negra y nada me alegra,
pinto un paso de cebra y vuelvo a celebrar,
acelerar mi fin dirán, en fin que más dará,
si voy ciego de speed, el mañana dirá,
mi vida un tobogán de subidas y bajones,
normal que me abandones, vivo en otra realidad.
Confié en una persona y la vida da lecciones,
este borracho inconforme es feliz en soledad,
solo me puedo fiar del vicio,
escribo para evitar matar o evitar el suicidio,
escribo para que tu boca pase hambre,
tu culo llore sangre y tu corazón sienta alivio,
es mi delirio, mi desastre,
soy el chico que no presentaras a tus padres,
y es que muchas huirían si supieran lo que cobro,
pero aún muerden la almohada recordando nuestros polvos,
olemos a alcohol y a fracaso,
por no saber diferenciar entre besos y vasos,
entre sexo y abrazos, pero
aún quedan locas nostálgicas de mi regazo,
borracho en publico y en la intimidad,
tristeza de un poeta cuestionado por la química,
por el cual no apostar ni un duro,
tú me rompiste el corazón pero
yo te rompí el culo.

Volvamos a empezar.

Como pasa el tiempo, sin que uno apenas se de cuenta. Este curso me está absorbiendo todas las energías, y como echo de menos tener tiempo para escribir(te). Pero no todo han sido cosas malas.
Ha cambiado tanto todo, pero muchas veces los cambios vienen bien. Ayudan a valorar más las cosas, las que tenías y las que tienes ahora, antes de que sea tarde. Y puedo decir, que así, disfrutando de las pequeñas cosas del día a día, la vida es un poquito menos triste. Un poquito menos gris.

Dile a tus amigos que matarías por mi, que te joderías los puños por verme sonreír.

La verdad es que no sé cómo lo haces, pero siempre eres tú.
Siempre vuelves a ser tú.
No hay manera de no volver a ti.

Y quiero que sepas que me acostumbraría a tu dolor, a tus planes, a tus enfados y a tu olor.

Sí, ese olor que tanto me gusta.

Sinceramente no puedo prometerte mucho, por que no tengo nada. Pero si me eligieses a mi, no volverías a sentir la soledad nunca más. Prometo hacer que en todos tus días grises haya un rayito de sol. Cuidarte y mimarte todos los días, como si no hubiera mañana. Darte besos por todos y cada uno de tus lunares, perdiéndome, para tener que volver a empezar, una y otra vez. Prometo hacer que te gusten los domingos y que los lunes sean menos malos. Dormir abrazada ti sin soltarte ni un momento, y hacerte café todas las mañanas, sólo para ti, por que ya sabes que a mi no me gusta. Y quiero compartir mis locuras contigo y hacerte reír siempre.

Sinceramente, odio las promesas. 

Pero es que eres tú.

Por ti lo que sea.

Lo triste es que no estás

aquí,

conmigo.

Aquí lloramos cada día que recordamos lo perdido.

Creí que te había olvidado, que todo había terminado, y me equivocaba.
El verano se ha acabado y te he vuelto a ver.
Hemos vuelto a todas nuestras rutinas, menos a la de besarnos en cada esquina.
Hemos retomado los planes de futuro que una tarde de domingo, hace muchos meses atrás, habíamos hecho juntos. ¿Y como puede el amor seguir vivo, después de haberse muerto tantas veces?
Ahora le toca sobrevivir a este invierno,
que espero que no venga muy guerrero,
ni muy frío,
aun que eso me da igual, por que sé que estarás tú para abrazarme en cualquier banco cuando empiece a temblar, y para darme un beso en la nariz y decirme que te encanto hasta cuando estoy enferma (y es que putos catarros).
Pero aún es demasiado pronto que volvamos a ser nosotros, aquel nosotros... Pero me conformo con quedarme en este punto toda la vida, al menos sé que te tengo conmigo.
Supongo que si has compartido con alguien hasta tus pesadillas, siempre va a formar parte de tu vida.

Sharif♥

Creo que la fuerza está en la mente,
creo que el poder está en la gente.
Lo que no creo es en las urnas ni en los votos,
pero creo en ti, creo en mí, creo en nosotros.
Por creer creo que todo es posible,
hasta la utopía de ser libre.
Infalible, el tiempo es insaciable,
la vida es increíble, la muerte insobornable.
Creo, que el mundo es un recreo,
que la vida es un paseo y no un trofeo,
y creo en los amigos, en los ángeles caídos,
Dios escribe recto usando renglones torcidos.
[…]
Creo en miradas, creo en el amor que me das,
no vengo solo, mi familia es lo que traigo detrás.
No sé de política ni de derecho,
sé de la química que late bajo el pecho.
Creo en lo que siento y lo que intuyo, lo mío es tuyo,
sin maquillaje, luchar con coraje vivir con orgullo.
Creo que se puede vencer al fuerte,
dejar de engañar a la suerte, dejar de correr y temer a la muerte.
Vivir como seas,
ir y venir como la luna y las mareas, besando las azoteas.
Pa que veas, creo que el coraje vence al miedo,
el ahora luego, el agua al fuego, el corazón alego.
Y creo que la vida es lo que ves,
lo siento hermano, creo que no hay nada después.
[…]
Creo que está loco, este mundo loco,
creo en lo que veo y lo que toco, en aprender si me equivoco.
Creo en el deseo y en su templo,
dejarse la vida luchando pa intentar vencer al tiempo.
Y si la vida es juego yo me juego el resto,
tuyo y mío hermano, mira, el mundo es nuestro.
Por supuesto aún tengo mucho que aprender,
hoy brindo por los errores que quedan por cometer.
Por repetir, la vida es insistir, resistir,
exprimir el elixir del existir.
Llorar y reír, como el niño que atesora,
porque nunca hubo más presente que el ahora.

Depresión: Exceso de pasado. Ansiedad: Exceso de futuro.

Etapas. La vida son etapas.
Se termina el verano, empieza una nueva etapa.
Tal vez la etapa más difícil vaya a ser la siguiente a esta, pero eso no le resta importancia a lo que se me viene encima. Como dice mamá: 'si le pones ganas, puedes con todo', y eso espero.

Fumo porque prefiero poder decir que me he matado yo y que no ha sido la vida

Duele. Y mucho.
Sonrío. Pero no es verdad.
Y oscurece. Más por dentro que por fuera.
Septiembre. Siempre empieza bien y siempre acaba mal.
Vuelta a la rutina. Rutina de despertadores demasiado temprano.
De cansancio. Caras largas y ropa al azar cada mañana.
De horas de estudio. Que paso pensando en ti.
Y ya no te veré. Tan a menudo.
Duele. Y mucho.

No se puede fumar el cigarro de después si no ha habido un antes.

Y es que en el fondo soy una miedica.
Miedo a estar sin ti.
Miedo a estar contigo.
Me dan miedo las cosas nuevas. 
Pero la vida es avanzar, evolucionar, cambiar. Sí, cambios. Eso también me da miedo. Pero sabía que en algún momento de mi vida llegaría este momento. Tendría que dar el paso, y creo que estoy lista. Tampoco estoy segura, y debería estarlo, pero no puedo seguir rigiendo mi vida por el miedo, ¿donde quedó la niña que se tiraba al vacío diez veces al día? Y sobreviví, así que no puede ser tan malo.
Es hora de cambios. Cambios, cambios, cambios y más cambios. Pero cambios porque sí. Porque yo quiero. Porque ya me he cansado de hacer siempre lo mismo, que vida sólo hay una. Me apetece superar mis miedos, me siento con fuerzas.
Pero por quedarme con uno, para no olvidar lo que se siente al tener miedo... miedo a estar sin ti.

Quiero darte un beso tan largo como la distancia que nos separa.

Siempre he escuchado a la gente decir que las relaciones a distancia no funcionan, que eso no es amor de verdad, que no acaba llegando a nada bueno, pero yo te quiero más por cada kilómetro que me separa de tu piel. Tal vez sea la tortura más bonita del mundo, y no veas como alivia cuando corres a besarme al vernos. Y es jodido, cuando quiero verte y no puedo, cuando quieres abrazarme y no puedes. Pero, ¿qué hay de eso de que el amor rompe barreras? Yo sí creo en las relaciones a distancia, y tú lo haces incluso más fácil, y juntos podemos.
Cuando te tumbas apoyando la cabeza en mis piernas y pierdo mis dedos entre tu pelo, y ronroneas, porque sé que te gusta, que me echabas de menos, que nos necesitábamos, y ahí estamos, en un banco en mitad de ninguna parte, brillando más que las estrellas que estamos viendo, porque contigo la vida tiene sentido.
237 km. 237 besos son los que te daría cada día al despertarme.

Y que a pesar de todo, yo sigo aquí cuando tu vida no es lo que planeaste.

Nadie ha dicho que la amistad sea fácil, y de hecho, nadie me saca de quicio como tú, nadie me hace llorar como tú cuando pienso que puedo perderte, o cuando haces algo que no me gusta. Pero tampoco hay nadie que me haga tan feliz, que me entienda como tú lo haces, sin que tenga ni que hablar, que tú ya me entiendes sólo con mirarme, ya sabes lo que estoy pensando antes de que lo diga.
Hay veces que me dan ganas de tirar la toalla contigo, y sé que tú te desesperas conmigo, pero aquí seguimos, a pie de cañón y cada día con más fuerza.
Y como tú siempre me dices, nada nos va a separar ya, porque ya hemos superado de todo.
Y sé que las palabras se las lleva el viento, por eso no voy a escribirte más, por que nosotras demostramos día a día, pero también quería dejarle claro al mundo que te quiero, a pesar de todo.

Quiéreme por las veces que me callo y reviento la pared a puñetazos, corazón.

Que bonito nombre tiene, felicidad.
Siempre ha sido mi frase favorita. Y ahora de verdad la entiendo. Felicidad. Felicidad en estado puro. No puedo ni expresarlo con palabras. Felicidad es lo que siento ahora mismo, con mi canción preferida de fondo, parece que vuelo, moviéndome de un lado a otro en la silla, escribiendo con una sonrisa en la cara, dulce sensación.
Esto me llena, podría vivir en este instante toda la vida. No sé ni de donde saco toda esta alegría, no sé que me pasa, pero no quiero dejar de bailar, no quiero que la canción se acabe nunca.